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Navidad del Señor según las visiones de la Beata A. C. Emmerick

La Beata Ana Catalina nos narra la bella y significativa visión que tuvo sobre el Nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo. La gruta de Belén resplandece y los Ángeles cantan gloria, María y José se disponen a adorar al Rey de reyes que llega al mundo para salvar a la humanidad.
Navidad del Señor según las visiones de la Beata A. C. Emmerick


Los audios han sido grabados con la voz de la Hna. Claudia Ortiz.

La Navidad del Señor según las visiones de la Beata Ana Catalina Emmerick

«He visto que la luz que envolvía a la Virgen se hacía cada vez más deslumbrante, de modo que la luz de las lámparas encendidas por José no eran ya visibles. María, con su amplio vestido desceñido, estaba arrodillada con la cara vuelta hacia Oriente. Llegada la medianoche la vi arrebatada en éxtasis, suspendida en el pecho. El resplandor en torno a ella crecía por momentos. Toda la naturaleza parecía sentir una emoción de júbilo, hasta los seres inanimados. La roca de que estaban formados el suelo y el atrio parecía palpitar bajo la luz intensa que los envolvía» describe Ana Catalina sobre la visión del Nacimiento en Belén.

1. La Anunciación

En este relato escuchamos que la Beata Ana Catalina Emmerich tuvo la gracia no solo de contemplar en visión mística, sino también de presenciar el momento en que la Santísima Virgen recibió el anuncio del ángel. Fue poco después de sus bodas con San José, quien había emprendido un viaje a su casa paterna. Mientras tanto la Virgen María quedaba al cuidado de su madre Santa Ana y otras santas mujeres.

2. La visitación

Unos días después de la anunciación, María emprende un viaje con presteza hasta la casa de su prima Santa Isabel, quien se llena del Espíritu Santo en su presencia y aclama a la madre del Señor. Por su parte, María entona su cántico de alabanza y gratitud a Dios, el Magnificat. María quedó con Isabel tres meses, hasta el nacimiento de Juan.

3. El adviento

Santa Ana junto con la Virgen María y las demás mujeres preparan el ajuar del niño que está en camino. José recibe la orden del Ángel de ir hasta Belén. Emprenden el viaje penoso hasta Belén, no encuentran albergue, José se entristece y es consolado por María.

4. El nacimiento

José lleva a María a una cueva que conocía en Belén y allí, estando en profunda oración, da a luz al Salvador. José y María conmovidos, lo adoran.

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