La historia de conversión de Luma Simms, madre de 5 hijos dañados por el divorcio, quien era protestante y se convirtió al catolicismo, conmocionó al mundo luego de sus tajantes declaraciones en el portal First Things:«La Iglesia Católica tiene una bella y rica doctrina sobre el matrimonio».
Luma Simms es autora del libro «Gospel Amnesia» (Amnesia del evangelio) en el mismo, relata su impactante testimonio y manifiesta: «El mismo día en que mi alma se convirtió al catolicismo, descubrí que no podría recibir la comunión, porque soy una mujer divorciada y vuelta a casar». Esta verdad magisterial sustentada en la doctrina, la tradición y los evangelios, lejos de hacerla dudar de su conversión desde el protestantismo, confirmó su adhesión a la Iglesia.
Dolor y alegría
Luma cuenta su historia al portal First Things, mencionando que tuvo «lágrimas de dolor y alegría» al encontrarse con «la verdad sobre la transubstanciación», que es negada por los protestantes. Saber que en la hostia consagrada está realmente el cuerpo vivo de Cristo, dice que le llevó a sentir «dolor por haberse tardado en descubrir esta verdad», pero al mismo tiempo «alegría porque finalmente habían (ella y su segundo marido) encontrado el fundamento de la autoridad que reside en su Iglesia, fundada por Él y que mandó custodiar a todos los Apóstoles instruidos por Él».
Del calvinismo al catolicismo gracias a la Encíclica Humanae Vitae
Los hijos, determinantes
Luma recuerda que llegó desde el calvinismo al catolicismo gracias a «la hermosa encíclica Humanae Vitae que ablandó mi corazón… Luego nada me parecía suficiente y necesitaba conocer todo aquello que la Iglesia cree, basada en la enseñanza de Jesús» Así descubriría esta conversa el Magisterio de la Iglesia y sorprendería a muchos su capacidad de obediencia.
«Debido a mi divorcio y también porque otro miembro de mi familia recientemente dejó su matrimonio después de 43 años, vi como nuestros hijos crecían con muchas dudas y cuestionando el matrimonio. Un día, uno de nuestros hijos, al hablarnos nos mostró la ansiedad que le provocaba saber que no podía asegurar que papá y mamá estarían siempre juntos, a su lado». Este dolor del hijo, cuenta Luma, fue determinante para comprender cuán «profundamente influenciados por nuestras elecciones y la cultura crecen los hijos». Pero a la vez, dice, la impulsó a confirmar su conversión y decisión: «Formarlos en una iglesia que se mantiene firme en el matrimonio para toda la vida».
Es a través de la comunión que espiritualmente soy alimentada por el Señor
«Doctrina rica y hermosa»
La Iglesia Católica, dice Luma, «tiene una doctrina rica y hermosa para enseñar de la plenitud del matrimonio en la imagen de la unión entre Cristo y su esposa, la Iglesia».
El crecimiento espiritual de esta conversa se ha nutrido particularmente de la vida sacramental. No comulga físicamente, pero nutre su alma y camino de fe mediante la comunión espiritual…
«Muchas veces -nos cuenta- me levanto en medio de la noche pensando, ¿cómo es que he llegado a considerar el catolicismo? Pero luego en la mañana durante la misa diaria, orando en la liturgia, ¡experimento la profunda presencia de Dios, incluso si no recibo la Eucaristía y comulgo espiritualmente!… Es a través de la comunión que espiritualmente soy alimentada por el Señor».
Compromiso
Luma Simms afirma que «no es la Iglesia» quien le niega la Comunión física, «soy yo quien desobedeció a Dios abandonando mi primer matrimonio» a pesar de que era «inmadura y las circunstancias me llevaron a esa drástica medida». Tal vez, señala, «algunas personas podrían sorprenderse por mi comunión con una Iglesia en la que no puedo comulgar físicamente porque soy divorciada y vuelta a casar. Pero a menos que me puedan probar lo contrario, creo que cualquier acción para autorizar el dar la comunión a quienes somos divorciados vueltos a casar corrompería la doctrina del matrimonio reduciendo además la imagen de la Iglesia como esposa de Cristo… demolería a la Iglesia. Yo he encontrado refugio en la iglesia. Por mi salvación y la de mis hijos rezo para que la Iglesia no cambie su doctrina“.
Luma Simms es Iraquí, se casó con su primer marido en la Iglesia Católica Caldea Iraquí y actualmente busca un Decreto de Nulidad, confiando en Dios por una decisión justa. «Cualquiera que sea el resultado, no puedo y no me alejaré de la Iglesia por apoyar firmemente las enseñanzas de Cristo» manifiesta.
Tomado de Portaluz.org